miércoles, 22 de enero de 2014

Intimidad

Escudriño en tu cerradura. No para verte, sino para oír al grillo escondido en ella, ese que no te deja dormir. Agazapado, compruebo que en tus fantasías no te cohíbes ni te reprimes, mostrándote espontánea y natural. Me gusta cómo eres cuando no te sientes observada. 



Hoy me apetecía recuperar este micro que escribí hace tiempo. Será por los grillos...


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4 comentarios:

  1. LA CASA ENCENDIDA22 de enero de 2014, 22:39

    Es muy bueno Sara, tiene esa chispita que hace quedarte pensando...
    Besicos muchos.

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  2. Albada Dos22 de enero de 2014, 22:47

    Será por los grillos, pero su canto nos remontan a noches al aire libre, donde la intimidad estaba más acá de puertas o cerraduras. Sin jaulas, uno se permite la sinceridad de ser quien es.

    Un abrazo.

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  3. Miguel Ángel Pegarz23 de enero de 2014, 9:59

    Me gustó. Yo he hecho una lectura erótica.

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  4. Humberto Dib23 de enero de 2014, 14:02

    No lo recordaba o no le leí, pero me gustó mucho. Entre la ternura y el erotismo.
    Un fuerte abrazo.
    HD

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