Precioso!! que no ha querido romper esas alas, el miedo a volar lo hemos sentido todos.Cariños....
A veces para empezar a volar lo mejor es un buen empujón :-)Un abrazo, Oriana.
Una ternurita ese pichón mamengoso. Por más que se esté preparado ¿a quién no le ha dado miedo abandonar la seguridad del hogar?Cortito, conciso, y al punto; un hiperbreve de ley.Cariños, Mariángeles
Nunca nos sentimos preparados lo suficiente para volar y, sin embargo, qué bien volamos solos, de todas formas :-)Gracias, Mariángeles. Un abrazo.
¿Basado en hechos reales? jeje.
En mi caso no, Miguelángel, que como se nos rompió el nido, tuve que aprender a volar, por necesidad, muy pronto sola :-) Y mi niño todavía es pequeñín, pero ya veremos en unos cuantos años...Un abrazo.
Precioso hiperbreve. En la actualidad a mucha gente le obligan a romperse el ala, pues si vuelas te estrellas.
Y es triste, Lorenzo. Casi es mejor intentar volar, con el riesgo que conlleva, a romperse las alas tan pronto...Un abrazo.
Cuesta a veces, sí.Un abrazo, Diego.
El problema es cuando te las rompen...Un besazo!
¡¡Qué belleza de dibujo Sara! ¿Cuánto tiempo te lleva hacer cada ilustración? ... yo como soy lenta dibujando, varios días, o semanas.A mí tambien me pasó un poquito. O una ala rota, o un poco de morriña por abandonar el hogar familiar. Me gusta cómo lo has expresado.Un besote muy fuerte
Sara, fantástico dibujo, los colores elegidos y cuanto me sugiere. ¿que fue primero el dibujo o el relato?Se complementan certeramente y alimentando los sentidos.Besos muchos ♥♥
Gracias por dejar tus comentarios.
Precioso!! que no ha querido romper esas alas, el miedo a volar lo hemos sentido todos.
ResponderEliminarCariños....
A veces para empezar a volar lo mejor es un buen empujón :-)
EliminarUn abrazo, Oriana.
Una ternurita ese pichón mamengoso. Por más que se esté preparado ¿a quién no le ha dado miedo abandonar la seguridad del hogar?
ResponderEliminarCortito, conciso, y al punto; un hiperbreve de ley.
Cariños, Mariángeles
Nunca nos sentimos preparados lo suficiente para volar y, sin embargo, qué bien volamos solos, de todas formas :-)
EliminarGracias, Mariángeles.
Un abrazo.
¿Basado en hechos reales? jeje.
ResponderEliminarEn mi caso no, Miguelángel, que como se nos rompió el nido, tuve que aprender a volar, por necesidad, muy pronto sola :-)
EliminarY mi niño todavía es pequeñín, pero ya veremos en unos cuantos años...
Un abrazo.
Precioso hiperbreve. En la actualidad a mucha gente le obligan a romperse el ala, pues si vuelas te estrellas.
ResponderEliminarY es triste, Lorenzo. Casi es mejor intentar volar, con el riesgo que conlleva, a romperse las alas tan pronto...
EliminarUn abrazo.
Cuesta a veces, sí.
ResponderEliminarUn abrazo, Diego.
El problema es cuando te las rompen...
ResponderEliminarUn besazo!
¡¡Qué belleza de dibujo Sara! ¿Cuánto tiempo te lleva hacer cada ilustración? ... yo como soy lenta dibujando, varios días, o semanas.
ResponderEliminarA mí tambien me pasó un poquito. O una ala rota, o un poco de morriña por abandonar el hogar familiar. Me gusta cómo lo has expresado.
Un besote muy fuerte
Sara, fantástico dibujo, los colores elegidos y cuanto me sugiere. ¿que fue primero el dibujo o el relato?
ResponderEliminarSe complementan certeramente y alimentando los sentidos.
Besos muchos ♥♥