jueves, 21 de agosto de 2014

Rutinas

Jacinto se acicalaba para ir al trabajo. Era sumamente metódico; por eso, cuando abrió el armario, se extrañó al ver el gancho de una percha colgado en sentido contrario a los demás. Se abofeteó entonces varias veces para regañar a ese compañero de piso tan desordenado con el que convivía.


Este microrrelato ha sido publicado hoy en el blog Cincuenta palabras.


7 comentarios:

  1. Uff, miedo da saber como reaccionará cuando sea algo más serio. Enhorabuena por la publicación. Siento la falta de seguimiento últimamente, pero tengo serios problemas de conectividad.

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    1. Esperemos que su reacción sólo llegue a los cachetazos :-)

      Gracias por tus comentarios, Miguel Ángel. Sabes que siempre me alegra tu visita.

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  2. ¡Vaya! No sabía que me conocías,
    Muy bueno, Sara

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    1. ¿Y en quién crees que me inspiré para el cuento? Jajaja.
      Gracias, Luis.
      Un saludo.

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  3. ¡Bárbaro¡, cuanto hablas del personaje con tan solo 50 palabras, pero la intensidad del argumento que imaginas es total.
    Enhorabuena de corazón.

    Besos fuertes,

    tRamos

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    1. Dicen que conocemos más al personaje por sus acciones. En este caso, una reacción exagerada, tanto como lo es su obsesión o su soledad.

      Gracias, Tramos. Un saludo.

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  4. Habrá que ir con prudencia. Los amigos imaginarios suelen ser muy rencorosos...

    Un abrazo fuerte.

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