jueves, 12 de abril de 2012

Con un par de narices



como parte de su convocatoria de relatos

"Con un par de narices"






La anosmia del Ciber-hombre


Diseñó un aparato capaz de crear recuerdos y mejorar los antiguos, salpimentando aquellos que de tan sosos y aburridos, no huelen a nada. Se valió de piezas nuevas e ingredientes frescos, pero también de latas, frascos o simple chatarra. Una vez ensamblado el artilugio, lo conectó a la parte posterior de su cabeza y desde allí extendió un tubo flexible hasta su nariz de acero. Después de inhalar con fuerza volvió a disfrutar de recuerdos fragantes, balsámicos, picantes, hasta que comenzaron a surgir lágrimas de angustia, irritación, tos, estornudos… se había excedido con el spray de pimienta. No tuvo más remedio que refugiarse en su parte cibernética; al menos ella no sentía.


Podéis leerlo aquí.


10 comentarios:

  1. Repito lo dicho allí:
    Un micro de ciencia ficción, simpático y bien escrito, lleno de olores, como debe ser, y con un final metálico. Suerte en el concurso, nos vemos en el libro.

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    1. Si tuviese que imaginar un olor para el micro sería ese: un olor metálico, a cable chamuscado, aceite y pimienta ¡aaaaachús!
      Nos vemos en el libro, Ximens. Gracias por tu doble comentario. Un abrazo.

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  2. De allí vengo, Sara. De contribuir con mi +1 para un cuento que he disfrutado de principio a fin!

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    1. Gracias, Patricia. Tus visitas siempre son un plus para mí.
      Besos.

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  3. Ya he pinchado. Qué bien se te dan los ciberhombres. Un beso.

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  4. No todo es como lo imaginamos, y mucho menos como lo deseamos. Los proyectos se tuercen y los resultados no suelen alcanzar el final deseado. Preparé un guiso segun me surgía en la mente, donde llegaban los olores de las combinaciones que pensaba. Una vez realizado y servido, opté por prepararme un bocadillo de chorizo, que nunca falla.
    Lo importante es plantearse proyectos y llegar a realizarlos aunque el resultado no sea el deseado.
    Un beso Sara

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  5. Lo leí allí Sara, y me dejaste la fragancia de los aromas de la pimienta. Mi relato también era anósmico, tuvimos parecida idea.

    Un beso Sara.

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  6. Este micro, por alguna razón, lo leo tuyo y lo siento mío.
    Mi enhorabuena por esa forma magnífica de unir las sensaciones olfativas que nos retrotraen a un recuerdo, y que a través de un aroma nos transportan al pasado, o nos afianzan al presente.
    En el desarrollo se intuye que, algo metálico nos ha de fijar al presente, como un tornillo a una escalera.

    Mi felicitación más sincera.

    Un abrazo

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