Corría por los maizales
sintiendo en mi espalda al espantapájaros riéndose de mí, cuando Madre vino en
mi auxilio. Agitando sus enormes alas me llevó hasta el nido y me dijo: “Ya es
momento de aprender a volar”.
Aprender a iniciar el vuelo ¡como los grandes escritores, Sara!. Me gusta tu espantapájaros en blanco y negro pero con los pies colgando sobre ese manto de color. Un espantapájaros ideal para un cuento ilustrado. ;)
Gracias por ese comentario en mi blog. Yo sí te leo ( y te veo) a menudo, pero es cierto que llevo tiempo sin dejar huella. HUella positiva, por supuesto. Un abrazo y a seguir así.
Hola, CDG. Se hace difícil visitar a todos, y más dejar en todos huella. Y aunque no me pase a menudo por tu blog, cuando lo hago me pego un atracón de leer micros buenos. Un abrazo.
Me he acordado de una propuesta de micro que anda circulando para mañana y que quizá no hayas visto. A lo mejor te interesa participar y aportar tu increíble fantasía: http://marinahm.blogspot.com.es/2012/10/tomae-y-yo-os-proponemos-un-juego.html
Me he pasado por allí, pero no me ha dado tiempo de preparar nada para la ocasión. Otra vez será. Gracias, de todos modos, por la información. Un abrazo.
Hola Sara, llego hasta aquí por recomendación de Juanlu. Tengo un blog de dibujos y según Juanlu en algunos parece que coincidimos en el estilo de los trazos. Te invito a visitarlo y así poder conocer tu opinión.
¡Me encantan tus dibujos, Atenea! Y sí, tienen un estilo parecido por la tinta negra que usas y esa profusión de detalles. Allí me quedé un buen rato, como si se tratara de una galería de arte. Un abrazo.
Muchas gracias Sara , por la visita y por tu valiosa opinión. Ayer pasé por aquí con prisa. Yo también creo que hay cierta coincidencia en algunos detalles. Los tuyos van unidos siempre a un relato, los míos surgen espontáneamente como un garabato que va cobrando vida, sin más. El relato creo que es el subconsciente quien me lo envía. Pero es cierto que algunos trazos tienen el mismo estilo. Encantada de pasar por aquí. Un fuerte abrazo, Sara !!!
Letras que nos hacen sentir, a tus lectores, el miedo del pequeño protagonista. Me encantó, y mis hijos (voraces lectores...) comparten cien por ciento la opinión. ¡Saludos!
:) chulismo cuento para niños y grandes, me ha gustado la sorpresa de ese niño-pájaro.
ResponderEliminarBesos!
Sean polluelos o niños, siempre llega el momento de aprender a volar.
EliminarGracias, Juanlu. Un abrazo.
Tierno, muy tierno, Sara! Beso grande
ResponderEliminarHa salido así de tierno el micro. Aunque el dibujo no lo sea tanto (a mí los espantapájaros me dan un poco de repelús).
EliminarUn abrazo.
Un micro para todas las edades, y una ilustración de artista.
ResponderEliminarBesosss
A.M.A.
Gracias, Amparo.
EliminarUn abrazo.
Qué bueno, Sara. Hora de aprender a volar, y era literal. Y una ilustración que no pierde tu toque personal.
ResponderEliminarAbrazos.
Era literal, aunque no deja de predominar en el cuento la metáfora. Y sí, ese espantapájaros es de los míos :-)
EliminarUn abrazo, Miguelángel.
Aprender a iniciar el vuelo ¡como los grandes escritores, Sara!. Me gusta tu espantapájaros en blanco y negro pero con los pies colgando sobre ese manto de color. Un espantapájaros ideal para un cuento ilustrado. ;)
ResponderEliminarBesos de lunes para tí.
Es verdad, Laura, que es fácil imaginar un álbum ilustrado con esta idea.
EliminarUn abrazo de martes frío y lluvioso.
Me gusta como rompes con ternura una escena de terror.
ResponderEliminarEs eso exactamente, Cybrghost. Es así, con ternura, como se rompen los terrores infantiles.
EliminarUn abrazo.
El terror no sólo se disipa con la alas.
ResponderEliminarRico micro.
Abrazos
Claro que no, Sergio. Pero las alas le darán confianza tanto de huir lejos como de posarse, desafiante, en el sombrero del espantapájaros.
EliminarAbrazos.
Gracias por ese comentario en mi blog. Yo sí te leo ( y te veo) a menudo, pero es cierto que llevo tiempo sin dejar huella. HUella positiva, por supuesto.
ResponderEliminarUn abrazo y a seguir así.
Hola, CDG. Se hace difícil visitar a todos, y más dejar en todos huella. Y aunque no me pase a menudo por tu blog, cuando lo hago me pego un atracón de leer micros buenos.
EliminarUn abrazo.
Inesperado, genial. Me ha encantado, éste y muchos otros que te he leído.
ResponderEliminarEres realmente buena con los micros.
Un abrazo (y muchas gracias por tu paso por mi blog) :)
Gracias, Volarela. Muy interesante, como te dije, tu entrevista. Pude comprobar que nos parecemos en muchas cosas :-)
EliminarUn beso.
Me he acordado de una propuesta de micro que anda circulando para mañana y que quizá no hayas visto. A lo mejor te interesa participar y aportar tu increíble fantasía: http://marinahm.blogspot.com.es/2012/10/tomae-y-yo-os-proponemos-un-juego.html
ResponderEliminarBesos
Me he pasado por allí, pero no me ha dado tiempo de preparar nada para la ocasión. Otra vez será. Gracias, de todos modos, por la información.
EliminarUn abrazo.
Hola Sara, llego hasta aquí por recomendación de Juanlu. Tengo un blog de dibujos y según Juanlu en algunos parece que coincidimos en el estilo de los trazos. Te invito a visitarlo y así poder conocer tu opinión.
ResponderEliminarhttp://misdibujosgarabateados.blogspot.com.es/2012/10/armonia-iii.html#comment-form
Un abrazo, Sara !!!
¡Me encantan tus dibujos, Atenea! Y sí, tienen un estilo parecido por la tinta negra que usas y esa profusión de detalles.
EliminarAllí me quedé un buen rato, como si se tratara de una galería de arte.
Un abrazo.
Muchas gracias Sara , por la visita y por tu valiosa opinión. Ayer pasé por aquí con prisa.
EliminarYo también creo que hay cierta coincidencia en algunos detalles. Los tuyos van unidos siempre a un relato, los míos surgen espontáneamente como un garabato que va cobrando vida, sin más. El relato creo que es el subconsciente quien me lo envía. Pero es cierto que algunos trazos tienen el mismo estilo.
Encantada de pasar por aquí.
Un fuerte abrazo, Sara !!!
tierno y terrorífico
ResponderEliminarHola, Vittt. Somos un cúmulo de sensaciones encontradas desde la más tierna infancia...
EliminarUn saludo.
Me encantó la inversión de sentido, y sigue siendo tierno, aunque el niño sea un niño-cuervo.
ResponderEliminarUn beso.
HD
Niño-cuervo, tal como me lo imaginé. Ya le hará frente a ese espantapájaros cuando aprenda a volar.
EliminarUn beso.
Delicioso Sara. Nó sé qué es mejor si la ilustración o el texto. Me quedo con el resultado de su conjunción.
ResponderEliminarBesos.
Letras que nos hacen sentir, a tus lectores, el miedo del pequeño protagonista. Me encantó, y mis hijos (voraces lectores...) comparten cien por ciento la opinión.
ResponderEliminar¡Saludos!