Dibuja en el cielo un arcoíris y deslízate
sobre él como si fuese un inmenso tobogán que atraviesa el horizonte. Al llegar
al final encontrarás un cofre repleto de monedas de oro: cárgalo en un barco de
velas colosales y hazte a la mar, dispuesto a la aventura. Navega cruzando el
océano hasta una enigmática isla perdida y allí, en la gruta milenaria que se
halla en el interior del volcán, esconde el ansiado tesoro. Y por último, traza
un mapa detallado del camino para que, cuando despiertes, sepas regresar.
Oníricamente hermoso o viceversa.
ResponderEliminarGracias, Miguelángel.
EliminarUn abrazo.
En las coordenadas de un mapa tornasolado, se escapó un línea.
ResponderEliminarEra tu señal para hallar el cofre. Tropezando entre haces de color, es fácil de encontrar con tus indicaciones.
Un abrazo.
Un mapa que nos ayude a encontrar ese mágico mundo de los sueños en nuestra realidad cotidiana.
EliminarGracias por tus palabras tornasoladas.
Un abrazo.
Muy tierno, Sara, me gustó.
ResponderEliminar¡Saludos!
Me ha salido un cuento muy naif e infantil. Y por eso la ilustración, acorde con el texto :-)
EliminarUn abrazo, Juan.
Volverá en sueños, y no se perderá. Es lo que tiene soñar
ResponderEliminarEn sueños es difícil perderse ¿Pero en la realidad?
EliminarUn beso.