Y tanto, hasta frío hace.
Y el poquito sol que se deja ver entre los edificios apenas calienta. Un abrazo, Luisa.
Un haiku urbano, que bueno Sara, calienta más de lo que presume.Un saludo.
Pues sí, un haiku urbano con sol tibio de otoño :-)Un abrazo, Miguel.
En éste otoñotanto Sol -frío urbano-heló al humano.Perdón por el intento. Abrazo
Muy buen intento, Ramón. Un abrazo.
Me gusta mucho. Y además purista.
Me alegra que te guste, Miguelángel. Un abrazo.
Los urbanitas, tras el cristal suspiran por ver el cielo.Un abrazo
Gracias por dejar tus comentarios.
Y tanto, hasta frío hace.
ResponderEliminarY el poquito sol que se deja ver entre los edificios apenas calienta.
EliminarUn abrazo, Luisa.
Un haiku urbano, que bueno Sara, calienta más de lo que presume.
ResponderEliminarUn saludo.
Pues sí, un haiku urbano con sol tibio de otoño :-)
EliminarUn abrazo, Miguel.
En éste otoño
ResponderEliminartanto Sol -frío urbano-
heló al humano.
Perdón por el intento. Abrazo
Muy buen intento, Ramón.
EliminarUn abrazo.
Me gusta mucho. Y además purista.
ResponderEliminarMe alegra que te guste, Miguelángel.
EliminarUn abrazo.
Los urbanitas, tras el cristal suspiran por ver el cielo.
ResponderEliminarUn abrazo