miércoles, 23 de noviembre de 2011

Los tres reyes

A millones de años luz de distancia una civilización fenecía: sucesivas guerras habían devastado su mundo. Los tres pueblos supervivientes buscaban otro hogar en el Universo viajando a bordo de sendas naves, capitaneadas por tres reyes. Cuando arribaron a la Tierra un 5 de enero se sorprendieron: los estaban esperando con desfiles y carrozas. Al parecer, una antigua profecía predecía su llegada colmada de ofrendas. La ingenua magia de esa gente fascinó a los tres monarcas. Mientras ellos lanzaban desde arriba sus explosivos regalos, la humanidad miraba al cielo manteniendo la ilusión hasta el último momento.


organizada por La Esfera Cultural.


19 comentarios:

  1. Estos reyes son un poco diferentes de los que me mantenían despierta esa noche, esperando ilusionada su llegada. Pero tu micro me gusta por la imaginación que has puesto en él.

    Un beso

    ResponderEliminar
  2. Apocalíptico. O sea, que nos liquidaron, Algo de realismo se intuye con tantos juguetes en las casas.

    ResponderEliminar
  3. Es genial el relato, ¿lo has mandado al concurso de La Esfera Cultural? La ilustración de los Reyes podría ser una felicitación de Navidad, que al abrirla estallara, sin herir a nadie, "claro".
    Besos

    ResponderEliminar
  4. Una historia diferente y original de los Reyes Magos.
    No te falta imaginación, Sara. Y eso es estupendo para los que te leemos :-)

    Un beso.

    ResponderEliminar
  5. Qué original Sara!!!
    Y me gusta mucho la ilustración.

    Besos desde el aire

    ResponderEliminar
  6. Yo me pierdo con la historia. Esto sería antes, durante o después del oro, incienso y mirra?
    Espera, que lo he vuelto a leer y ya lo he entendido. Se supone que podría pasar cualquier enero, no?
    Pues vete tú a saber, Sara. El mundo anda revuelto, y lo fenicios no van a ser menos.

    ResponderEliminar
  7. Me gusta, Sara. Una navidad y unos reyes en clave ciencia-ficción o quién sabe, quizás no...

    Besitos

    ResponderEliminar
  8. Admiro la originalidad y tu relato tiene a chorros. Qué momento para llegar a la tierra, qué cambio en la historia...¿o no?
    A seguir regalando...
    Un beso.

    ResponderEliminar
  9. Magnífico micro Sara. Es muy original y acaba con la tradición navideña. Ya sabía yo que no eran trigo limpio. Un beso.

    ResponderEliminar
  10. Así de ingenuos somos... manteniendo la ilusión hasta el último momento.
    Buena revisión de los tres monarcas.

    ResponderEliminar
  11. No sé si seremos todos ingenuos pero sí sé que algunos escriben maravillosamente bien.
    Con tu permiso lo guardo en mi tuiter.

    Bravo, Sara!!!!!

    ResponderEliminar
  12. Yo me quedo con los de ahora jajaja
    muy bueno

    un saludo

    ResponderEliminar
  13. Paloma: Estos reyes son definitivamente muy diferentes a los de los camellos...

    Ximens: Después de ellos se acabaron las "felices fiestas"...

    Ana: Lo mandé después de leer tu comentario, no había caído en la cuenta de hacerlo antes. Gracias. Me parece interesante la iniciativa que planteas, podemos mandarnos "tarjetas de felicitación" para estas fiestas así, un tanto atípicas, con su microrrelato. A ver si la ponemos en práctica.

    MJ: Hay que mirar con otros ojos...

    Gracias, Rosa. Un beso.

    Miguel Ángel: Tú lo has dicho, cualquier enero nos encontramos con regalos explosivos cayendo del cielo...

    Elysa: Esperemos que sea solo ficción...

    CDG: Llegan en el momento justo de cumplir con la profecía.

    Mar: Por lo visto acaban con cualquier tradición. Lo bueno de los cuentos y de las pelis apocalípticas es que son solo eso, historias de ficción.

    Fernando: Lo más maravilloso de estas fiestas (sin contar con el consumo que generan) es esa ilusión que se intenta mantener con ellas hasta el final.

    Gracias, Patricia. Siempre es un honor que te lleves un relato.

    María Luisa: Para serte sincera, yo también :-)

    ResponderEliminar
  14. Cruda realidad, siempre nos invaden, hasta los americanos o los chinos.

    Blogsaludos

    ResponderEliminar
  15. A mí me encanta este dibujo de 3 reyes majos. Tan majos que parecen sacados de un pasaje de la guerra de las galaxias, y han cambiado camello por naves, aunque no parece que se libren de las suntuosas carrozas con las que los hombres quieren que desfilen.

    Un besote.

    ResponderEliminar
  16. Hay fechas en las que nos aflora la ingenuidad. Yo, a mis 32 años, todavía me acuesto nervioso la noche de reyes... por si acaso.
    Un saludo.

    ResponderEliminar
  17. La nostalgia infantil, Sara, que pueda contagiarte día tras día la dulzura de la cara de Daniel o los recuerdos de un pasado vivido rápidamente han provocado sentimientos que han tomado posesión de ti. Nacen de lo más genuino de tu interior y se desbordan en una creatividad frenética, como si tu cuerpo y tu mente no pudieran alojarlos y te desgarraran buscando salida. Creemos que porque los sentimientos sean nuestros estamos a su altura o somos capaces de albergarlos, pero no siempre es así. A veces hay sentimientos que nos sobrepasan, provocando, como en tu caso, la maravillosa transcendencia de la que mira el mundo como si fuera recién creado...

    Un abrazo fuerte.

    ResponderEliminar
  18. La Tres Reyes Ilustrados están estupendos, me gustan.
    Yo también soy de los que hasta el último momento me quedo mirando ingenuamente, qué le voy a hacer, soy humano... :)

    Un abrazo

    ResponderEliminar
  19. Adivín: Es verdad, siempre nos invaden; y no solo en las películas...

    Laura: Podrían haber salido de un capítulo de la guerra de las galaxias, es verdad. Aunque estos muy majos no son...

    Alberto: La ilusión nunca se pierde, aunque nos termine bombardeando la realidad.

    Amigo mortal: Siempre tan bellas tus palabras... Cuando los sentimientos nos sobrepasan buscamos canalizarlos, expresarlos de algún modo. Y el arte es una buena manera.

    Ximo: Siempre nos echamos tierra encima, pero los humanos tenemos muchas virtudes. Y mantener la ilusión hasta el último momento es una de ellas.

    ResponderEliminar

Gracias por dejar tus comentarios.