domingo, 2 de marzo de 2014

La vida de otros

Apretujados en el portal del viejo edificio los novios se demostraban su amor entre besos y caricias. No intuían que estaban siendo observados por la vecina del 4º B, ni por la pareja de ancianos del tercero, ni por el portero que en esos momentos barría la escalera. Tampoco sabían que el aspecto negro y derruido de las paredes se debía a un antiguo incendio en el que varios vecinos habían quedado atrapados, condenados a cotillear la vida de los demás para siempre. 


Esta foto es obra de Earthquakeboy.

12 comentarios:

  1. Cuántas cosas nos puede contar una foto, más si se trata de la vida de esos otros que son los personajes que esconde.
    Me gustó mucho, Sara, felicitaciones.

    Cariños, M.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias, Mariángeles. La vida de aquellos que no aparecen en la foto, pero que se intuyen.

      Un abrazo.

      Eliminar
  2. Inquietante y demoledor final. Aunque antes del golpe ya da para una buena reflexión. Me gustó mucho.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Habría que buscar la manera de que cruzaran al otro lado. Eso para otro cuento :-)
      Un abrazo, Miguel Ángel.

      Eliminar
  3. Los jóvenes amantes son ciegos y sordos a la soez mirada y cotilleo de los habitantes de una casa quemada de falta de amor.

    Muy bueno. Un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Como dices, a los jóvenes amantes poco les importa que los observen. Ellos se bastan :-)
      Gracias, Albada. Un abrazo.

      Eliminar
  4. ¡Qué final, Sara! Y qué destino el de esos fantasmas macabros...
    Excelente, me gustó mucho.
    ¡Saludos!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias, Juan. Triste el destino de esos fantasmas, sí.
      Un abrazo.

      Eliminar
  5. Bueno, al fin y al cabo, poco daño podrían hacerles quienes ya no están a este lado.
    Buenísimo.
    Un beso.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Solo cotillear pasivamente, más no pueden hacerles... a menos que le demuestren de alguna manera que la vieja casa está encantada (dándoles algún susto :-) Pero esa sería otra historia...

      Un saludo.

      Eliminar
  6. Hola Sara. La idea, cómo lo cuentas... genial. Enhorabuena.

    ResponderEliminar

Gracias por dejar tus comentarios.