Ella me abandonó dejándome
una puñalada en el corazón. Llamé a una vidente: “La herida cerrará pero el
dolor no se irá”. Llamé a mi madre: “Te dije que ella no valía la pena, nunca
me gustó”. Llamé a mi mejor amigo:
“Él acaba de salir hacia el aeropuerto”. Llamé a la ambulancia, me desangraba.
Y esas,son las que más duelen...
ResponderEliminarSe ha vuelto tan egoista que ni siquiera se preocupa ya de sí mismo...Bueno, casi al final...
ResponderEliminarUn beso.
Muy bueno!!!
ResponderEliminarfeliz 2012!
Genial
ResponderEliminarBravo, Sara!!!!!
¡Ay! las puñaladas del amor... ¡Son las peores!
ResponderEliminar¡Bravo, Sara! Buen micro.
Besitos.
Estupendo micro.
ResponderEliminarEnhorabuena, Sara, tus dibujos son únicos.
Un saludo afectuoso.
Iba a decir "que bonito" pero no se si es la expresión más correcta :)
ResponderEliminarBesazos inocentes
El final es perfecto. Si relees el cuento, las llamadas se convierten en una despedida, en una búsqueda de redención. ¡La poética muerte del desamor no era tal, sino puñal!
ResponderEliminarMuy, muy bueno
Las palabras a veces pueden alentar, pero cuando la sangre corre hasta el fondo de la pena, más vale ambulancia que verbos...
ResponderEliminarMe ha encantado. Toda una declaración.
Besos.
Sara, estupendo porque juegas con los sentidos de las palabras. Se muere porque le deja y porque le ha matado.
ResponderEliminarMe ha gustado mucho.
Un abrazo.
Byron: Las heridas abiertas de verdad son las que más duelen!
ResponderEliminarAmigo mortal: Demasiado acostumbrado a apoyarse en los demás. Pero al final solo nos tenemos a nosotros mismos...
Marilyn. Gracias, Feliz año también para ti.
Gracias, Patricia. Un beso.
MJ: Esas puñaladas sí que son dolorosas! Un abrazo.
Juglar: Me alegra que te gusten mis dibujos aunque sean un tanto "peculiares". Un abrazo.
Dani: No es nada bonito un amor así, que apuñala...
Un abrazo que aprecia tu inocencia :-)
Alex: Una despedida, sí. Llamando a la ambulancia primero podría salvarse, y tal vez no lo quería.
CDG: Todavía necesitaba confirmar, mediante esas llamadas de teléfono, que ese amor no era el correcto. Ni esa puñalada que podría dar fin a su vida bastaba.
Abrazos fuertes!!
Nicolás: Estamos tan acostumbrados a usar esas metáforas para el desamor, que nos sorprende cuando son palabras literales.
ResponderEliminarUn abrazo.
Hermosa ilustración y muy original historia. Un beso grande y felicitaciones
ResponderEliminarPues yo voy a decir ¡qué bien contado! y ¡qué breve!. Espero que la ambulancia salvara su herida, porque la más profunda es insalvable.
ResponderEliminarUn abrazote.
Excelente
ResponderEliminarPablo. Gracias. Un abrazo.
ResponderEliminarLaura: Como le dijo la adivina, su herida cerrará pero el dolor no se irá!
Besos.
Elysa: Me alegra que te guste. Un fuerte abrazo.
Muy bueno :) Y es que a veces, cuando pedimos ayuda, se abren abismos de soledad que sólo una ambulancia es capaz de saltar...
ResponderEliminarUn abrazo
La espera es muchas veces dura y se enquista entre tus miradas inseguras, lejanas, sangrantes de amor.
ResponderEliminarSaludos incontinentes
Me parece fabulosa la puñalada menos visible (pero la que termina de señalar la verdadera gravedad de la herida), la del amigo, qué bien escogido lo del aeropuerto... perfecto. Qué bien...
ResponderEliminarXimo: La ambulancia es ese primer auxilio para esa herida abierta, sea física o emocional (o ambas), tan difícil de curar.
ResponderEliminarAdivín: Esa espera enquistada que solo se cura con tu presencia...
Un abrazo.
JAMS: Qué bien que no se te ha escapado ese detalle, que agrava aún más la herida.
Un abrazo.
Esto es morir de amor, bueno de desamor más bien. Pero, Sara, el aeropuerto me despista (quizá se me ha taponado algún agujero con cemento).
ResponderEliminarAbrazos.
Menuda mujer, menuda madre... menudos todos. El detalle del amigo escapando (¿con su mujer?) hacia el aeropuerto es muy bueno.
ResponderEliminarPara mí que sobrevive, la vidente dice: "La herida cerrará"... mmmh, me gustan los micros que me hacen dar vueltas.
Un saludete, Sara.
Hola Miguel Ángel: Lo del aeropuerto lo desvela Alberto en el comentario posterior :-)
ResponderEliminarAbrazos.
Alberto: Si es verdad el vaticinio de la vidente, entonces sobrevive!
Un saludo.